En el momento del sorteo de los cuartos de final, hasta 300.000 aficionados del Borussia pidieron entradas para ver la vuelta ante el Barça en Dortmund. Después del baño de anoche en Montjuïc (4-0), el interés para asistir al partido habrá bajado en picado. No creo que ni un solo aficionado del Borussia crea en el milagro, porque el Barça le pasó por encima desde el primer al último minuto. En el minuto 6 de encuentro, su portero Kobel ya había parado dos goles cantados de Lamine Yamal y de Lewandowski. Y, de nuevo el genio de Rocafonda pudo marcar después de hacer una cola de vaca dentro del área. El partido de ambos fue descomunal. Lamine Yamal estuvo en todas, marcó el ritmo del encuentro, mareó a su lateral, dio el centro del 2-0, lanzó en velocidad a Fermín para el 3-0 y marcó el 4-0. Lewandowski, que sí celebra los goles contra su ex equipo, al que ya le ha marcado 29 goles entre el Bayern y el Barça, metió el segundo sobre la línea y anotó el tercero con un derechazo de auténtico ‘killer’. 

¿Y Raphinha? El brasileño volvió a ser el de antes de irse a vacilar a los argentinos en el parón de selecciones. Marcó el gol que abría la lata y regaló dos asistencias. Sigue siendo el máximo artillero de la competición. Sus 12 goles en 10 encuentros en Champions lo dicen todo. Eso sí, el de ayer, además de sisarle los derechos de autor a Cubarsí, a punto estuvo de que el VAR lo anulase por lo que habría sido el fuera de juego más absurdo del año. 

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